(11/07/2017) El Ayuntamiento aprovecha las obras de Paseo de Colón para realizar trabajos previos para el futuro carril bici que discurrirá junto a la acera entre el Paseo Cristina y Reyes Católicos

Se procede a una reordenación de los carriles para así no tener que realizar nuevas obras sobre el nuevo pavimento cuando se habilite el carril bici, contemplado en el vigente PGOU para facilitar el acceso al Casco Antiguo en bicicleta. El cambio más palpable e inmediato para los usuarios de esa vía será en el tramo comprendido entre las calles Santander y Antonia Díaz. Los actuales 3 carriles se convertirán desde mañana en 4, de ellos uno para el bus y en un futuro otro destinado a bicicletas Se han delimitado también las nuevas dársenas para subida y bajada de viajeros de los autobuses turísticos en la acera que da a la Torre del Oro y a lo largo de las nuevas instalaciones turísticas de Marqués de Contadero.

El Ayuntamiento de Sevilla, a través de la Gerencia de Urbanismo y de la Delegació de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores, culminará en la tarde-noche de hoy la labores de pintado de las marcas viales tras las obras de reasfaltado acometidas en Paseo de Colón y el Paseo de las Delicias, entre Reyes Católicos y Avenida de María Luisa. Estos trabajos de pintura se han aprovechado, además, para proceder a una reordenación de los carriles de Paseo Colón en dirección hacia Reyes Católicos, ante el proyecto de habilitar en los próximos meses y en ese mismo sentido un carril bici, contemplado en el vigente Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la ciudad de Sevilla.

Con esta reordenación de los carriles, Paseo de Colón quedará estructurado en tres tramos. El primero de ellos, entre el Paseo Cristina y Santander, contará con tres carriles para la circulación general –tal y como está–. El segundo se prolongará desde la calle Santander hasta la calle Antonia Díaz, donde los actuales tres carriles se transformarán en cuatro, tres para la circulación general y el otro reservado a los servicios de autobuses y taxis. Y cuando el carril bici bidireccional sea una realidad, ocupará el más cercano al acerado, desplazando el destinado al transporte público.

Y por último, el tercer tramo llegará hasta Reyes Católicos, con tres carriles para la circulación general –igual que actualmente–. Hasta que el carril bici no esté habilitado, los usuarios de Paseo de Colón solo van a percibir el cambio desde mañana en el segundo de los tramos –que discurre entre la calle Santander y la calle Antonia Díaz–, puesto que serán ahora cuatro carriles y no tres, reservado uno al transporte público. Y cuando el carril bici se convierta en una realidad, autobuses y taxis ocuparán el segundo carril a contar desde la acera.

“Esta reordenación la realizamos precisamente ahora para aprovechar las recientes obras y dejar el terreno preparado para el futuro carril bici. De esta manera, cuando la Gerencia de Urbanismo lo habilite, no habrá que realizar de nuevo fresados en el asfalto nuevo, lo que supondría un gasto adicional y nuevos inconvenientes para el tráfico rodado”, según ha explicado Juan Carlos Cabrera, delegado de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores y también del Distrito Casco Antiguo, con el que se ha coordinado la actuación.

Este carril bici en el Paseo de Colón se recoge en la red estructurante de bicicarriles del actual PGOU “y pretende facilitar el acceso al Casco Antiguo en bicicleta a través de una vía, Paseo de Colón, que es fundamental para el conjunto de la circulación y que tendrá un carril bici sin mermar su utilización por parte del coche privado y del transporte público”, ha abundado.

Con los trabajos de pintura, concluyen las obras de reasfaltado en Paseo de Colón y Paseo de las Delicias, que comenzaron el día 2 de julio y cuyo plazo de finalización era el 16 de este mes. Los trabajos se han realizado entre las ocho de la tarde y las siete de la mañana y por fases para reducir molestias. “Gracias a esta planificación y a la coordinación entre Urbanismo, Movilidad y Distrito Casco Antiguo, el ritmo de las obras se aceleró y han terminado antes de lo previsto”, ha sostenido Juan Carlos Cabrera.

Se está aplicando a todas las marcas viales la nueva pintura acrílica especial ciudad con árido antideslizante, mejorando la adherencia sobre pavimento mojado y, por tanto, reduciendo el riesgo de deslizamiento para las motos y motocicletas. En los pasos de peatones, no existe pintura central y los cruces semafóricos disponen de zona de parada exclusiva para motos. Son iniciativas todas incluidas en el plan de seguridad vial que puso en marcha el Ayuntamiento de Sevilla en la primavera del año pasado.

Subida y bajada de autobuses turísticos 

Por último, esos trabajos de pintado se han aprovechado también para delimitar la nueva zona para bajada y subida de viajeros de los autobuses turísticos en Paseo de Colón, en la acera que da a la Torre del Oro y a lo largo de las instalaciones actuales del Centro de Atención Integral al Visitante de Marqués de Contadero, tal y como se había anunciado.

Se han habilitado tres dársenas para 3, 9 y 4 buses turísticos, en aproximadamente 268 metros lineales –55 metros, 153 metros y 60 metros, respectivamente–. En total, habrá capacidad para 16 buses, que ocuparán la zona que hasta hace poco se encontraba acotada por el vallado de las obras del Centro de Atención al Visitante de Marqués de Contadero, por lo que en ningún momento supone la modificación del número de los carriles para la circulación general. Dentro de esa zona se ubicará igualmente la parada del servicio público de coches de caballos.

Esta ubicación para la subida y bajada de viajeros pretende reforzar el Centro de Atención al Visitante “como centro neurálgico al recibir a los viajeros, a las puertas mismas del Casco Histórico, a los pies de la Torre del Oro y con las vistas a Triana”, ha remarcado Cabrera. Permitirá, igualmente, ofrecer un espacio destinado al este servicio de traslado de viajeros, de forma que se dé una alternativa a los autobuses que habitualmente ocupan de forma irregular el carril reservado a bus y taxi en el sentido Puente de Triana, con el consiguiente perjuicio para la velocidad comercial de los autobuses de Tussam y del propio servicio público de taxis.

Se trata de una iniciativa consensuada con las asociaciones de servicios turísticos integradas en la Confederación de Empresarios de Sevilla (CES) para proceder a una reordenación de las paradas de autobuses para la subida y bajada de los turistas en ubicaciones que permitan mayor fluidez a esta actividad y al conjunto del tráfico en la capital y, a la vez, propicien que la primera imagen de la ciudad que tengan los viajeros sea atractiva y en un entorno monumental.