El Ayuntamiento reabre las piscinas de gestión directa del Instituto Municipal de Deportes para la práctica deportiva desde este miércoles
Las instalaciones estarán disponibles tras de un proceso de desinfección profunda con nuevos protocolos de higiene, seguridad y distanciamiento social a través del diseño de itinerarios y la limitación de accesos a zonas comunes.
El Ayuntamiento de Sevilla, a través del Instituto Municipal de Deportes, retoma desde este miércoles la actividad en las piscinas municipales de gestión directa en el marco de la alerta sanitaria decretada con motivo de la pandemia del COVID-19. Este contexto redefine el uso de estas instalaciones para entrenamientos, cursos o natación libre con distanciamiento social entre los usuarios, que no podrán exceder la cantidad de cuatro personas por calle para actividades con corcheras y que no podrán superar el 30 por ciento de aforo en actividades sin corcheras como criterio general.
La apertura de las piscinas municipales procede después de realizar labores de limpieza y desinfección en profundidad y de rotulación de itinerarios de seguridad entre otras iniciativas recomendadas por las autoridades sanitarias. Igualmente se reforzarán los procedimientos de análisis del agua de los correspondientes vasos junto a la redefinición de usos. Se reforzarán además protocolos de higiene y se introducirán normas de distanciamiento social en función de las nuevas normativas.
Las medidas que garantizan el uso responsable de las instalaciones comenzarán en espacios comunes. Permanecerán precintadas las duchas de los vestuarios aunque sí estarán abiertas las duchas de acceso a los vasos, los aseos, o los vestuarios y cabinas de cambio de ropa con uso limitado en función de su capacidad en cada complejo deportivo. Se introduce la obligación del uso mascarillas en zonas comunes junto a chanclas, gorros o gafas, así como la necesidad de lavarse las manos además de otras rutinas de aseo personal antes de la práctica deportiva. Los usuarios recibirán bolsas en las que podrán guardar objetos y pertenencias personales que podrán ser depositadas en espacios comunes específicamente habilitados pero no en taquillas. Se evitarán aglomeraciones en los accesos mediante la llegada a las instalaciones cinco minutos antes de la hora convenida y puntual acceso reglado. Queda prohibida la utilización por usuarios que presenten síntomas.
La apertura permanecerá de lunes a viernes de 9,00 a 21 horas en rutinas de un máximo de una hora de duración según los calendarios diseñados. La nueva normativa ordena el acceso a natación libre, cursos o actividades regladas aunque se tenga plaza asignada, por lo que la participación debe reservarse de forma previa. Se mantienen vigentes los abonos para los accesos correspondientes a la natación libre también con reserva de acceso previa. En este sentido, a los usuarios que hubieran abonado el mes de marzo completo y no hayan podido disfrutar de la actividad por el estado de alarma se le descontarán los nuevos usos de los días no disfrutados y ya abonados.
Todos los accesos deben concretarse según la ordenanza municipal vigente con una antelación mínima de 48 horas mediante correo electrónico o teléfono de manera prioritaria, y en caso de no tener alternativa, de forma presencial. Se mantienen los canales habituales de abono para los supuestos en los que resulte necesario a través de transferencia bancaria o pago con tarjeta bancaria a través de TPV. El justificante del abono debe ser presentado en cada instalación o bien remitido al correo electrónico de cada centro deportivo en el transcurso de las 24 horas siguientes de la realización de la reserva de la plaza.
El delegado de Transición Ecológica y Deportes del Ayuntamiento de Sevilla, David Guevara, ha destacado “la adaptación del marco normativo al contexto actual para que los usuarios y las usuarias de todas las piscinas públicas”, situadas en los complejos de Bellavista, Rochelambert, Hytasa, Alcosa, Torreblanca, San Jerónimo, San Pablo o Tiro de Línea, “puedan disfrutar de esta reapertura priorizando el cuidado de la salud, con las mayores medidas de seguridad, con todas las garantías públicas y los servicios propios. Planteamos una apertura progresiva que permita la conciliación de las ganas de hacer deporte con la protección de la salud como única prioridad”.