Sevilla celebra el acto de entrega de las distinciones honoríficas de la ciudad con el ex vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, y la saetera Angelita Yruela como hijos predilectos, y el arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, como hijo adoptivo

También se ha distinguido con la Medalla de la Ciudad a 25 personas e instituciones y, a título póstumo, a Luis Álvarez Duarte, Antonio Dubé de Luque y Manuel Pareja-Obregón

El Palacio de Congresos y Exposiciones de Sevilla (FIBES) ha acogido hoy el acto de entrega de las distinciones honoríficas de la ciudad para personas y entidades correspondiente a 2020, ya que la crisis sanitaria originada por el COVID 19 impidió la celebración del tradicional acto institucional se celebra todos los años el 30 de mayo en el Teatro Lope de Vega con motivo del Día de San Fernando, patrón de la ciudad. 

Durante el acto, el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, quien ha presidido la ceremonia, ha destacado la labor de los homenajeados y homenajeadas en el día de hoy  y ha comenzado su discurso recordando la celebración del V Centenario de la Primera Vuelta al Mundo, al que ha puesto “como ejemplo de la infinita capacidad del ser humano para afrontar lo imposible; para resistir y reinventarse en la resiliencia”.

A este respecto, ha trasladado un mensaje de optimismo y esperanza ante la incertidumbre, al tiempo que ha recordado a las víctimas por la COVID-19. “Sevilla a lo largo de su historia ha sabido salir de situaciones graves y tiene que volver a ser la ciudad de la cultura, la ciencia, la universalidad, el emprendimiento y el trabajo; ligada al turismo y al comercio, claro que sí, pero también a la digitalización y la innovación como yacimientos de empleo y de oportunidades”, ha señalado el alcalde de Sevilla, al tiempo que ha apuntado a que “ahora se espera de nosotros que estemos unidos, aún en la discrepancia cuando la haya, aportando lo mejor de cada uno y construyendo juntos un proyecto colectivo que llamamos Sevilla”. 

Por último, Espadas ha recordado la figura del que fuera alcalde de Sevilla, Manuel del Valle. “La ciudad, en medio de una pandemia, vio partir a un hombre bueno que quiso a esta ciudad hasta el final de sus días, que asumió el mayor honor para un sevillano, ser su alcalde y que con su entrega y vocación de servicio ayudó a transformar y recuperar su vocación universal desde la moderación y el consenso, desde el rigor y la austeridad. Político con mayúsculas y mejor persona, gracias, Manuel del Valle, descanse en paz”, ha concluido. 

Alfonso Guerra ha sido el encargado durante la ceremonia de tomar la palabra en nombre de todos los homenajeados y homenajeadas y ha agradecido en nombre de todos y todas la distinción. Durante su discurso, ha destacado que Sevilla es el mejor ejemplo de “ciudad soñada, que además, una vez vivida, supera todo lo imaginado, lo que sucede con muy pocas ciudades en el mundo”. Guerra ha hecho un recorrido por grandes figuras que ha dado Sevilla y ha recordado el nombre de algunas de sus calles, “que no sorprenden al sevillano, pero que al visitante lo dejan sorprendido y suspendido”. 

“No hay que permitir que se nos desperdicie la gracia de los pequeños momentos de libertad que podemos gozar, ahora o cuando la plaga pase. Un mesa compartida con gente que queremos, unas criaturas a quien demos amparo, una caminata entre los árboles, la gratitud de un abrazo. Esto no son hechos racionales, lo sé, pero no es importante que lo sean, porque solo nos salvaremos por los afectos. Este acto que estamos viviendo hoy aquí es un acto de afecto, un acto de amor”, ha destacado Guerra al final de su discurso. 

Así, en el acto se ha procedido al nombramiento de Hijo predilecto al político Alfonso Guerra González, quien fuera vicepresidente del Gobierno de España entre 1982 y 1991, y de Hija Predilecta a la saetera, Angelita Yruela, quien ha desarrollado una destacada labor como intérprete y divulgadora de este cante. Respecto a la distinción de Hijo Adoptivo, este año ha sido para el arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, quien próximamente finalizará su episcopado en nuestra ciudad como consecuencia de su jubilación a los 75 años y quien ha destacado por una incesante labor para la mejora de la Archidiócesis y de permanente colaboración con las administraciones y entidades de la ciudad para el desarrollo de proyectos sociales en las zonas más desfavorecidas y para la protección del patrimonio.

 En el capítulo de las Medallas de la Ciudad, en el apartado de ‘Fomento de valores humanos y labor social’ se ha entregado la Medalla de la Ciudad a Alberto Máximo Calero, presidente del Ateneo desde 2010, entidad que organiza la centenaria Cabalgata de los Reyes Magos, e impulsor de la intensa agenda cultural de esta entidad y de las obras sociales de recogidas de alimentos, juguetes y apoyo a familias desfavorecidas; al Acuartelamiento Aéreo de Tablada, que cumple 100 años en nuestra ciudad y que se ha convertido en centro de referencia del Ejército del Aire, cuna de grandes hazañas aéreas y germen del sector aeroespacial en Andalucía; al Colegio Oficial de Graduados Sociales de Sevilla en su 50 aniversario, una entidad comprometida con los Objetivos de Desarrollo Sostenible en las líneas de derecho al trabajo, seguridad social, seguridad y salud y que desde 2013 cuenta con la Oficina Gratuita de Orientación Socio-Laboral atendiendo a más de 3.300 casos con más de 50 colegiados altruistas; al Colegio de Médicos de Sevilla, una institución con 125 años de historia, con una trayectoria de compromiso, entrega y solidaridad siempre vinculada al devenir de la ciudad, especialmente en este complicado año por la crisis sanitaria originada por el COVID 19; y a la Hermandad de la Divina Pastora de Santa Marina, que cumple 300 años de su fundación y que históricamente es conocido por ser la primera en el mundo que veneró a la Virgen con el título de Pastora y la primera también que juró defender el dogma de la Asunción, además de desarrollar una destacada labor solidaria y social. 

En el apartado de personas o entidades destacadas por su labor en el ámbito de la cultura o el arte y en la difusión de Sevilla, se han concedido las Medallas de la Ciudad al Centro Asturiano, que celebra su 50 aniversario en 2020 y que se ha convertido en una entidad abierta y en puente para los asturianos en Sevilla y para los sevillanos en Asturias con una intensa actividad cultural, gastronómica y social; al histórico establecimiento El Rinconcillo, que cumple 350 años desde su creación y en representación de la hostelería sevillana y en homenaje a todo el sector hostelero en un año muy difícil para su pervivencia; al periodista Rafael Rodríguez Guerrero, actual presidente de la Asociación de la Prensa de Sevilla, cuya trayectoria ha estado está estrechamente ligada a contar desde el análisis político de la actualidad tanto en radio como en prensa escrita y en televisión, la Transición, la Autonomía de Andalucía y los principales hitos de la Comunidad como periodista y responsable en diferentes medios de comunicación; al Club Tenis Betis en su 90 aniversario, una auténtica escuela de formación en deporte y en valores y entidad organizadora de la Copa Sevilla de Tenis desde hace 57 años, que sitúa a la ciudad en referente de torneos en tierra batida; a la cantante y compositora Isabel Fayos Manzano, trianera con una amplia trayectoria en el mundo de la música y que ha obtenido a lo largo de su carrera distinciones como Premio al Mejor Álbum y a la Mejor Canción, de los Premios de la Música de Andalucía; al grupo sevillano SFDK, originario del barrio de Pino Montano y pionero del rap en España con récord de ventas. 

En el capítulo de labor emprendedora, innovadora y profesional, se ha distinguido con la Medalla de la Ciudad a José Moya Sanabria, destacado economista y empresario, presidente, entre otras compañías, de Álea, Trajano Iberia y Persán, empresa que bajo su dirección se ha convertido en un líder consolidado en la península ibérica en detergentes y suavizantes, muy por delante de las multinacionales que operan en España; a Francisco Mesonero Fernández de Córdoba, presidente de la Fundación Adecco, que desde su creación en 1999, se ha dedicado a la integración laboral de personas en riesgo de vulnerabilidad a nivel local, nacional y lationamericano, impulsor en España de la responsabilidad social de las empresas y reconocido por su lucha contra las desigualdades; al doctor José Andrés Moreno Nogueira, médico, investigador, doctor, profesor y académico y referente internacional en la investigación del cáncer, fundador del Área de Oncología del hospital Virgen del Rocío de Sevilla; a la ingeniera Carmen Baena Sánchez, investigadora ligada a la innovación y a la tecnología y experta en Desarrollo Estratégico y Gestión de la Innovación, una de las diez únicas profesionales de España que cuentan con la certificación de mayor nivel dentro del sistema europeo en gestión del valor e impulsora de proyectos para el fomento del talento y las vocaciones científicas y tecnológicas de niñas y jóvenes; a la modelo y empresaria Raquel Revuelta Armengou, quien dirige desde 1992 la Agencia Doble Erre e impulsora de proyectos ligados a la gastronomía y a la moda como el Salón Internacional de la Moda Flamenca (SIMOF); al deportista Ramón Rodríguez Verdejo ‘Monchi’, quien jugara 10 años como uno de los porteros del primer equipo del Sevilla FC y quien desde 2000 es director deportivo de este equipo, con el que ha conseguido seis (de seis) Europa League, cinco finales de la Supercopa de Europa -con un título-, cuatro de la Copa del Rey -con dos títulos- y otras cuatro de la Supercopa de España, con un  triunfo. 

En el apartado de labor docente, educativa e investigadora, se ha entregado la Medalla de la Ciudad al doctor  Jaime Rodríguez Sacristán, quien ha destacado por fundar el Instituto Doctor Sacristán y por haber traído a Sevilla por primera vez criterios de trabajo específicos para menores con problemas psiquiátricos; a la doctora Salud Borrego López, médica, investigadora, profesora y académica y jefa de Sección del Laboratorio de Genética y Reproducción del Hospital Universitario Virgen del Rocío, donde trata enfermedades raras. Ha  liderado y participado  en  más de 50  proyectos de investigación competitivos de agencias internacionales, nacionales y autonómicas y es la primera mujer en conseguir ser Académica de Número electa de la Real Academia de Medicina de Sevilla en 2015; a Rocío López Igual, científica investigadora en biotecnología y biología sintética y miembro del Instituto de Bioquímica Vegetal y Fotosíntesis del CSIC en Sevilla y 5 años como investigadora en el Instituto Pasteur de París. Ha desarrollado un sistema absolutamente novedoso para eliminar bacterias infecciosas como alternativa al uso de los antibióticos; el Colegio Mayor San Juan Bosco, que cumple 75 años de su fundación y que se ha convertido en institución educativa y cultural de referencia, por la que han pasado 3.500 colegiales que han podido acceder a formación  humana y profesional abierta a los valores trascendentes y de la sociedad que les iba a tocar construir; al Colegio La Salle La Purísima en su 100 aniversario, un centro concertado, que ha contribuido al desarrollo de la zona norte del Casco Antiguo y que ha dedicado gran parte de los esfuerzos a la formación y educación de quienes menos recursos familiares han podido tener; el IES Luca de Tena, en el 50 aniversario de su fundación y por su trayectoria y vinculación con el barrio de Nervión; al Colegio Santa Isabel Religiosas Filipenses Hijas de María Dolorosa que cumple 150 años de su fundación y que pertenece a esta congregación volcada en sus orígenes en dar casa, formación y futuro a las niñas pobres originariamente para evitar que cayeran o sacarlas de las redes de explotación, una labor social que prosigue hoy en día; al Colegio Sagrada Familia Carmelitas de la Caridad del barrio de San Gil, que cumple 125 años de su fundación y que desde su origen mantiene una clara vocación de ayuda y solidaridad hacia las personas más desfavorecidas y que está muy presente en la vida de la zona de la Macarena. 

Por último, se ha concedido a título póstumo la Medalla de la Ciudad a Luis Álvarez Duarte, quien falleciera el pasado 13 de septiembre de 2019 a los 70 años de edad y que está considerado como el más destacado escultor e imaginero del último cuarto del siglo XX y principios del XXI con una profusa y venerada obra artística que la conforman un gran número de imágenes que no solo procesionan en la Semana Santa de Sevilla, también en el resto de capitales de provincia de Andalucía y en numerosos puntos de España; al imaginero, pintor y diseñador Antonio Dubé de Luque, fallecido el pasado 7 de noviembre de 2019, un artista integral y muy prolífico que ha tallado algunas imágenes para Sevilla y para otros puntos de Andalucía y cuyo estilo influyó decididamente en algunas de las cofradías de la Semana Santa de nuestra ciudad; y a Manuel Pareja-Obregón, artista, cantante y compositor que falleciera en 1995 y autor de unas 3.000 obras, entre las que destacan algunas de las sevillanas más conocidas. Colaboró con Rafael de León y Manuel Quiroga y compuso canciones para un numeroso grupo de famosos artistas como Enrique Montoya, Sergio y Estíbaliz, Paloma San Basilio, Lolita Flores, Rocío Jurado, Marisol, o Cantores de Híspalis.