Comienzan las obras de reordenación del entorno de la escultura de Cervantes, entre las calles Entrecárceles y Francisco Bruna, con un diseño que amplía el espacio peatonal y mejora la conservación y protección del Patrimonio
El objetivo de esta actuación es mejorar la zona y poner en valor el monumento. Este proyecto, con una inversión de 18.000 euros, ha sido aprobado por la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico.
El Ayuntamiento de Sevilla, con un proyecto del Distrito Casco Antiguo coordinado con la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente, ha iniciado las obras de reordenación del entorno de la escultura de Cervantes, ubicada entre las calles Entrecárceles y Francisco Bruna con el objetivo de ampliar el espacio peatonal, mejorar la zona y poner en valor el monumento. Este proyecto, con una inversión de 18.000 euros, ha sido aprobado por la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico.
“El objetivo de esta actuación es seguir avanzando en la mejora de un entorno de gran valor patrimonial de la ciudad que se encontraba deteriorado y que ahora va a ganar en accesibilidad y en estética contribuyendo a una mejora constante del Distrito Casco Antiguo”, explicó el delegado de Gobernación y Fiestas Mayores y del Distrito, Juan Carlos Cabrera.
El espacio en pleno centro de Sevilla situado entre las calles Entrecárceles y Francisco Bruna, junto al edificio de la antigua Audiencia Territorial, donde se alza el monumento a Miguel de Cervantes, ya inició su transformación en 2019 con la retirada a través de Lipasam de los contenedores de recogida neumática que provocaban un importante impacto visual en el monumento y que contribuían a generar problemas de limpieza o de residuos que no se depositaban correctamente.
Pese a este cambio, el monumento de Miguel de Cervantes, un busto en bronce realizado por el escultor Sebastián Santos Roja en 1974, seguía ensombrecido por la continua presencia de vehículos de gran porte a su alrededor y con un limitado espacio peatonal a su alrededor que garantizara la accesibilidad.
A fin de mejorar esta situación y lograr un adecentamiento de este enclave que permita también una mejor protección y conservación de la escultura, el proyecto va a ampliar el espacio peatonal frente al monumento eliminando la superficie ocupada hasta ahora por el aparcamiento de carga y descarga. La pavimentación de los espacios afectados se realizará con el mismo material al de la solería existente, compuesta por piezas de granito gris flameado de 35 x 35 centímetros colocadas a cartabón. Por último, con objeto de preservar el monumento a Cervantes, se colocarán en su frente siete marmolillos de granito, similares a los existentes en su entorno más cercano, con el anagrama de la ciudad.
La actuación diseñada responde a la estrategia que está desarrollando el actual gobierno municipal en aras a hacer del centro de la ciudad un lugar más habitable y sostenible generando para ello mayores espacios para el peatón y restringiendo y reordenando, en lo posible, el destinado al tráfico rodado.
Se completa además, la línea de trabajo para la protección del patrimonio de la ciudad. La escultura al escritor Miguel de Cervantes ha sido tratada en diversas ocasiones por la Gerencia de Urbanismo en el marco del programa de conservación de monumentos que desarrolla cada año este organismo. Las últimas intervenciones sobre esta obra se realizaron el pasado año 2019 y consistieron en la limpieza y aplicación de tratamientos correctivos de conservación sobre la misma, así como en la eliminación de grafitis de su basamento. Con anterioridad, en el año 2016, Urbanismo llevó a cabo una operación de limpieza pormenorizada del conjunto, consolidación de las superficies, sellado de las juntas y, aplicación de tratamientos biocida, hidrofugantes y de protección del bronce en que está realizado el busto.