Urbanismo concede al Arzobispado la licencia de obras para rehabilitar la iglesia del Convento de Santa Clara con 3 millones de inversión aportados por el Ayuntamiento en su estrategia de recuperación y puesta en valor del patrimonio
Las obras atañen a la restauración de la iglesia, sacristía y compás y se realizan en virtud de los acuerdos entre la Gerencia de Urbanismo y la institución eclesial. “El complejo de Santa Clara, con el Espacio Santa Clara, que es ya un eje para la política cultural municipal, la rehabilitación de la Torre de Don Fadrique y la recuperación de la iglesia, reforzará así su relevancia como enclave patrimonial y cultural”, destaca el delegado Antonio Muñoz.
El Ayuntamiento de Sevilla, a través de la Comisión Ejecutiva de la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente, ha concedido hoy la licencia de obras solicitada por el Arzobispado de Sevilla para llevar a cabo la restauración de la iglesia, sacristía y compás del Convento de Santa Clara, en el sector norte del Casco Antiguo de la ciudad. El proyecto cuenta con una inversión de 3 millones de euros aportados por el Ayuntamiento en virtud de su acuerdo con la institución eclesiástica para la recuperación de este conjunto patrimonial.
“Se trata del último paso administrativo para la recuperación de este Bien de Interés Cultural, pieza clave y de indudable valor patrimonial en el conjunto arquitectónico del antiguo Monasterio de Santa Clara, y una iniciativa que forma parte de la amplia estrategia municipal de rehabilitación y puesta en valor de nuestro patrimonio histórico y artístico”, ha destacado el delegado de Hábitat Urbano, Cultura y Turismo, Antonio Muñoz.
Aunque este primitivo monasterio, cuya construcción data de finales del XV o principios del XVI, fue cedido por el Arzobispado al Ayuntamiento en 2001 para usos culturales –y para cuya adaptación se han venido realizando desde entonces numerosas intervenciones municipales de recuperación y rehabilitación por casi 8 millones de euros–, el acuerdo mantuvo la iglesia y sus dependencias anexas en manos de la entidad eclesial, aunque el Consistorio asumió el compromiso de rehabilitarlas junto con el resto del conjunto.
A finales de 2018, la Gerencia y la Archidiócesis acordaron modificar el convenio suscrito en el año 2001 entre ambas partes, sustituyendo el compromiso municipal de rehabilitar la iglesia y sus dependencias contiguas por el de destinar los fondos necesarios para la restauración de esta zona, estimada en algo más de 3 millones de euros. Se estipuló, además, que el abono de esta cantidad se realizaría en cuatro anualidades, correspondientes a los años 2018, 2019, 2020 y 2021. Conforme a ello, la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente ha realizado ya los tres primeros pagos, de forma que la Archidiócesis pueda asumir económicamente la responsabilidad de rehabilitar la iglesia y zonas anexas.
La institución eclesial ha redactado el correspondiente proyecto técnico de obras que recibió el conforme de la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía el pasado 27 de enero. Una vez avalado por este organismo, la Gerencia puede autorizar ya las obras proyectadas, lo que ha hecho a través de su Comisión Ejecutiva celebrada hoy.
Estas obras consistirán en trabajos de consolidación estructural, conservación, mantenimiento y acondicionamiento que afectarán sobre todo a la cubierta del templo, la espadaña, los forjados y la crujía adyacente a la iglesia. En el primero de estos elementos se plantea la reconstrucción de una carpintería de lazo de gran relevancia, en tanto que los trabajos contemplados para la espadaña son de consolidación, aplome y atirantado para lograr su estabilización. Por su parte, los forjados –seriamente dañados en sus cabezas– serán reconstruidos y consolidados y, la crujía adyacente redistribuida. El proyecto también incluye el replanteo de huecos exteriores, así como la ejecución de nuevas escaleras y la instalación de un ascensor que dé servicio a ciertas zonas de la iglesia, sacristía y el compás.
En cualquier caso, el criterio genérico de la intervención es el de actuar exclusivamente en las partes, los elementos y detalles que lo requieren, planteándose en todos los casos intervenciones puntuales, superpuestas y reversibles. En la medida de lo posible, se emplearán materiales y técnicas compatibles con el monumento desde el máximo respeto al mismo y a la normativa nacional e internacional sobre los trabajos de restauración y conservación.
Se cierra así un proceso de años marcados por las dificultades para hacer frente a estas obras de restauración, que Arzobispado y Ayuntamiento de Sevilla han logrado desbloquear satisfactoriamente gracias al acuerdo contraído entre ambas instituciones hace ahora dos años. El delegado Antonio Muñoz ha recordado que, en paralelo, la Gerencia va a poner en marcha las obras de la Torre de Don Fadrique por un importe de un millón de euros y con un marco de cofinanciación obtenido a través de la convocatoria del 1,5 % cultural. “Por tanto, el complejo de Santa Clara, con el Espacio Santa Clara, que es ya un eje para la política cultural municipal, la Torre de Don Fadrique y ahora la iglesia, reforzará su relevancia como enclave patrimonial y cultural de la ciudad”, ha concluido.