El Ayuntamiento y Emasesa avanzan en la estrategia de fomento del ahorro de agua ante la actual situación de prealerta por sequía con la firma de un convenio con una docena de grandes empresas y entidades sociales y económicas para promover un consumo más responsable

Además, el Ayuntamiento publica un primer bando municipal para llamar a la colaboración del conjunto de la ciudadanía para preservar las reservas de agua y garantizar su volumen y calidad y para reducir en la medida de lo posible hábitos de consumo que supongan un gasto de agua innecesario. Todo esto se suma a los programas de inversiones, mejoras y transformación digital que se están acometiendo en el marco de esta estrategia que Emasesa lleva a cabo desde el pasado mes de marzo para reducir el consumo medio de agua.

El Ayuntamiento de Sevilla y la empresa metropolitana de aguas, Emasesa, continúan avanzando en la estrategia para fomentar un consumo de agua responsable ante la actual situación de prealerta por sequía con la firma de un convenio con una docena de grandes empresas y entidades sociales y económicas para que promuevan entre sus miembros los mensajes de concienciación sobre el ahorro de agua. 

El alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, ha presidido hoy la firma de este convenio junto al consejero delegado de Emasesa, Jaime Palop y al delegado Transición Ecológica y Deporte, David Guevara. El acto también ha contado con la presencia de representantes de todas las entidades y empresas firmantes, así como de los consejeros de Emasesa Modesto González —alcalde de Coria del Río—; Javier Fernández —alcalde de La Rinconada—; y Ana Isabel Jiménez,—alcaldesa de Alcalá de Guadaira—, entre otros. 

Las entidades y empresas que hoy se han sumado al acuerdo de colaboración son: la Asociación de Consumidores en Acción de Sevilla FACUA; la Asociación de Consumidores y Amas de Casa Híspalis; la Unión de Consumidores de Sevilla UCS; la Asociación de Hosteleros de Sevilla y Provincia; la Asociación de Hoteles de Sevilla y Provincia; la Confederación Provincial de Comercio, Servicios y Autónomos de Sevilla, APROCOM; el Colegio de Administradores de Fincas de Sevilla; y grandes firmas como Airbus, Cocacola Europacific Partner Europa, El Corte Inglés, Heineken y Renault España.

 Tras la firma de este convenio, el alcalde ha señalado que “la situación preocupante, pero no alarmante, en torno a la capacidad de agua que hay almacenada, nos lleva a poner en marcha una serie de medidas no solo relativas a inversiones y mejoras, sino también encaminadas a la sensibilización ciudadana para un consumo responsable. En esto se enmarca tanto el bando y la campaña que hemos lanzado y este importante acuerdo con grandes empresas de nuestro entorno económico y con las principales entidades sociales y económicas que se van a convertir en nuestros aliados para conseguir este propósito de reducir el consumo”. 

El objetivo de este convenio firmado hoy es que todos los actores sociales difundan y promuevan entre sus miembros los mensajes de concienciación, al mismo tiempo establezcan un diálogo para la generación de acciones conjuntas que permitan optimizar la demanda y hacerla más sostenible. 

Por su parte, Emasesa se compromete a asesorar en la adopción de sistemas de ahorro y uso racional del agua, a impartir formación al personal y asociados de los distintos colectivos y a elaborar un programa de acciones específicas que se desarrollarán en colaboración con las entidades firmantes. 

Igualmente, y dentro de estas medidas, el Ayuntamiento ha publicado un primer bando municipal que llama a la colaboración del conjunto de la ciudadanía para preservar las reservas de agua y garantizar su volumen y calidad y para reducir en la medida de lo posible hábitos de consumo que supongan un gasto de agua innecesario. También está previsto el lanzamiento de una nueva campaña por parte de Emasesa. 

OBJETIVO 90

Ante la ausencia de lluvias, Emasesa viene realizando una serie de acciones desde que anunció la prealerta por sequía, en noviembre de 2021. Estas acciones se han reforzado con la puesta en marcha de la campaña Objetivo 90 en el primer trimestre del año y que implica una serie de iniciativas con el objetivo a largo plazo de reducir el consumo de 116 litros por persona y día a los 90. El plan de emergencias ante situaciones de sequía marca determinados parámetros en función a la situación en la que nos encontramos y actualmente en prealerta el objetivo es reducir el consumo un 2%, objetivo que prácticamente se ha logrado durante los dos primeros meses de este año teniendo como referencia 2019, año pre pandémico y por tanto con unos índices de consumo habituales. Este porcentaje se eleva a un 5% cuando se entre en situación de alerta, lo cual se prevé en septiembre si prevalece la ausencia de lluvias. 

Además de las acciones de concienciación y sensibilización y de la colaboración con los principales agentes de consumo de agua en la ciudad, la estrategia puesta en marcha por parte de Emasesa también ha incluido una serie de inversiones y mejoras. Entre ellas, destaca la reducción de fugas en el suministro, con una mejora de la resiliencia del sistema gracias a un programa para optimizar la eficiencia en las infraestructuras. Además se ha perfeccionado la detección y la subsanación de las fugas y usos fraudulentos, lo que ha permitido la reducción de estas últimas casi en un 70% desde 1991. 

Igualmente se ha trabajado con los entes implicados (Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, regantes y Huesna) para la búsqueda de nuevas fuentes de agua y, en caso necesario, poder disponer de agua procedente de recursos externos al sistema. 

PLAN DE TRANSFORMACIÓN DIGITAL

A esto se suma la puesta en marcha de un Plan de Transformación Digital con una dotación presupuestaria de 14 millones de euros. El plan, que abarca el ciclo integral del agua y su relación con el usuario y el medioambiente, va ligado a la mejora de la eficiencia de la gestión del recurso ante episodios de sequía y prevención de lluvias torrenciales. 

Así, aplicará tecnología digital a la cantidad y calidad del recurso, a los distintos procesos productivos, especialmente potabilización y depuración, con lo que se ganará en calidad y en eficiencia; al conocimiento del usuario a través de la ciencia ciudadana y el lago de datos; y a la gestión de la red y al saneamiento (aducción inteligente; SIDI, Sistema de Información de Descargas Inteligente y Vertidos, Gestión Inteligente RED cantidad y calidad; EREMA, evaluación impacto sobre el medio ambiente urbano, etc…). 

Uno de los ejemplos más claros de las posibilidades de la tecnología digital es la implantación paulatina de un sistema de tele-lectura que permitirá conocer en tiempo real el consumo de cada contador y detectar posibles lecturas anómalas fruto, por ejemplo, de fugas. 

Desde mayo de 2018 el volumen de agua embalsada se ha reducido paulatinamente debido a la falta de aportaciones a los embalses, consecuencia de la reducción de precipitaciones. Así, se ha pasado del máximo de capacidad, 641 hm³, a los 320 hm³ actuales, un diferencial de más de 300 hm³ debido al déficit generado entre el gasto del sistema y las aportaciones. De hecho, en el presente año hidrológico (que comienza el 1 de octubre y finaliza el 30 de septiembre), las aportaciones han sido de 57 hm³, lo que supone el segundo peor año de la última década. 

Si se suma a los 115 hm³ del año 2020-2021 y los 175 hm³ del periodo 2019-2020, la conclusión es que, en el acumulado de los tres últimos años, el sistema ha recibido las mismas aportaciones que en la sequía del periodo 91-95. 

Además de la cantidad, la calidad del agua también es esencial. Fruto de la situación de escasez, los costes este año para la adquisición de productos y desarrollo de proyectos que garanticen la calidad del agua y garantía de suministro pueden ascender a los 8 millones de euros: sondeos de aguas subterráneas, captación de recursos extraordinarios, estudios hidráulicos en Gergal y Melonares, estudios sedimentológicos de los embalses, compra de reactivos, estudios para garantía de suministro etc. En este sentido, el control de calidad del agua de los embalses es un trabajo diario que se realiza desde hace años para preservar la calidad del recurso, establecer la mejor política de captación y para cuidar el medio ambiente. 

En este momento, Emasesa ha lanzado un proyecto para analizar con el máximo detalle las condiciones de vida en los embalses y de las poblaciones de peces. Esta circunstancia es esencial para la preservación del medio y, consecuentemente, de la calidad del recurso. 

LA IMPORTANCIA DE MELONARES

La incorporación de los recursos procedentes de Melonares también ha sido crucial para que el estado del sistema actualmente no sea dramático. De hecho, sin Melonares, la capacidad total del sistema sería de 456 hm³, casi un 30% menor a la actual y, en el actual período de escasez, el sistema estaría al borde del colapso, en situación de emergencia, con menos de 100 hm³, lo que se traduciría en menos de un año de autonomía. Sin embargo, hoy nos encontramos en Prealerta, con reservas suficientes para afrontar con calma los próximos meses y sin que se hayan producido cortes en el abastecimiento.