El alcalde destaca la reapertura de la Torre de los Perdigones como un ejemplo de recuperación de la Sevilla industrial que permite abrir nuevos itinerarios fuera del centro histórico

Este patrimonio de la ciudad amplía el espacio para el visitante en la Macarena y ofrece un recurso cultural para el disfrute del sevillano La antigua fundición incluye una cámara oscura y un mirador privilegiado, además de contenidos expositivos que ayudan a reinterpretar la historia de Sevilla y podrá visitarse de miércoles a domingo de 10 a 14 horas por cinco euros

La Torre de los Perdigones vuelve a reabrir sus puertas al público con una oferta ampliada que supone un primer hito en la estrategia de recuperación del patrimonio industrial de Sevilla y que abre nuevos itinerarios turísticos y culturales fuera del centro histórico, en este caso, por el norte y el barrio de la Macarena.

El alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, ha presidido el acto de reapertura este mediodía. “Hoy nos planteamos un reto importante, que Sevilla empiece a ser conocida también por sus antiguas fábricas, como la fundición de la que formó parte esta torre, Artillería, la Fábrica de Tabacos, las Atarazanas, la Fábrica de Vidrio… y que esta herencia nos sirva para conectar con la Sevilla de la innovación, la que está en la Cartuja o en la Agencia Española Espacial en San Jerónimo y tracemos nuevos itinerarios por una  ciudad que es muy desconocida aún y que mira al futuro con otra cara”, ha comentado Muñoz, que ha estado acompañado por los delegados de Economía, Comercio y Turismo, Francisco J. Páez, y las delegadas de Patrimonio, Carmen Fuentes, y del distrito Macarena, Clara Macías, además de por el director gerente de Sevilla City Office, Antonio Jiménez.

Julián Sobrino,  doctor en Historia del Arte y uno de los mayores expertos de España  en patrimonio industrial, es el autor del proyecto expositivo que se suma a la reapertura de la torre y ha intervenido también para poner en contexto el significado que este legado supone para la historia de la ciudad y las oportunidades que ofrece para conocer Sevilla con otros enfoques. “Sevilla es una ciudad de oficios y de industria y éste es un relato que no se ha contado aún y que ofrece muchas posibilidades a la ciudad”, ha comentado el profesor.

La incorporación de la Torre de Perdigones a la oferta de la ciudad es, según ha comentado el delegado Francisco Javier Páez, una oportunidad también para mejorar la calidad de vida de la ciudadanía y de los visitantes porque permitirá repartir mejor los flujos de turistas derivándolos hacia la Macarena y ganar un espacio para el disfrute y la convivencia de los residentes. “Todo forma parte de nuestra nueva estrategia para conseguir que Sevilla tenga un turismo más sostenible en todos los sentidos y enmarcamos este acto en la nueva gobernanza de Sevilla, con la que buscamos que ésta sea una ciudad compartida donde los beneficios que genera la actividad turística se repartan por los barrios también”, ha comentado el delegado insistiendo en que la intención es llevar al turismo hasta la Macarena, pero de una  manera ordenada, dándole sentido y escuchando a los vecinos.

En esta línea, el acto se ha aprovechado para reconocer la labor desarrollada por el dirigente vecinal Ángel Hueso, que cumple 50 años al frente del movimiento asociativo y que ha mostrado su implicación por la apertura de nuevos itinerarios turísticos por la zona norte de Sevilla.

La torre se recupera con la cámara oscura, un artefacto mágico que permite ver Sevilla de una manera distinta, y el mirador privilegiado que muestra vistas de la ciudad y su área metropolitana desde 45 metros de altura. Y se acompaña de un recorrido a través de paneles por la historia de Perdigones y la Sevilla industrial.

La intención es que éste sea un hito desde el que partan nuevos itinerarios por la Macarena que vinculen ese pasado de industria que tuvo. De hecho, hay un mapa que señaliza ya una veintena de edificios y complejos de interés y que se irán trabajando a partir de ahora desde Sevilla City Office. Desde la Fábrica de Enrique Ramírez y Pérez, de Aníbal González, en las calles Torneo, Bazán, Mendigorría y Pizarro, a la propia fundición de San Francisco de Paula de Los Perdigones, los Altos Colegios de la Macarena, el  Hospital de las Cinco Llagas, el Instituto Anatómico Forense, las viviendas en la calle Pedro Tafur, las Naves industriales en la calle Muñoz León y las de la Calle Froilán de la Serna, el .Hospital de la Cruz Roja “Victoria Eugenia”, las Viviendas del Monte de Piedad en la Ronda de Capuchinos y las Naves Industriales en la Ronda de María Auxiliadora. Siguiendo en la Avenida de Miraflores con la Fábrica de Tejidos La María, la vivienda del empresario Pedro Lázaro, la subestación eléctrica de la Cía. Catalana de Gas y Electricidad, la Fábrica de Sedas de Santiago Pérez en avenida de Miraflores, el Garaje Miraflores, las viviendas y talleres de Faustino Martíne, la Fábrica de Vidrio la Trinidad, la Barriada Retiro Obrero y la Barriada Pío XII y las Escuelas La Salle.

En los próximos días se iniciará el trámite para otorgar la concesión del edificio anexo a la torre, un restaurante que abrirá de nuevo las puertas para dar servicio a los visitantes de este enclave.

La antigua torre de la fundición de San Francisco de Paula, de 1885, podrá visitarse de miércoles a domingo de 10 a 14 horas inicialmente. Y las entradas se deberán adquirir online a un precio general de cinco euros. Enlace a la compra de entradas AQUÍ

La jornada se ha iniciado con actividades  dirigidas a los escolares, en las que han participado 80 niños de los Altos Colegios Macarena, que está vinculado desde su fundación en 1894 a este corredor de industrias que se instaló en el siglo XIX en esta zona de Sevilla. Los niños han interactuado en un debate con el profesor Julián Sobrino, que ha estado acompañado por la arquitecta Isell Guerrero, también máster en patrimonio industrial. Y luego han podido realizar un recortable en 3D de la torre, además de otros  materiales plásticos que recuerdan también cómo el proceso de recuperación de la torre se inició en 1992, en el contexto de la Expo 92.