El Ayuntamiento de Sevilla acomete los trabajos previos para iniciar la restauración del Arco de la Macarena en el marco del proyecto de intervención integral sobre el conjunto de la muralla

Tras la colocación del andamiaje, los trabajos de arqueología se afrontarán la próxima semana. El proyecto para el Arco cuenta con un presupuesto de 205.000 euros y la intervención completa sobre la Muralla alcanza los 3 millones. De las cuatro fases de obras en las que se ha planificado la intervención sobre el conjunto de la Muralla de la Macarena, dos están ya en macha, destaca el delegado de Hábitat Urbano, Cultura y Turismo, Antonio Muñoz.

El Ayuntamiento de Sevilla ha comenzado, a través de la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente, los trabajos previos para acometer la restauración proyectada en el Arco de la Macarena, con la que se pretende a mejorar el estado general de este Bien de Interés Cultural y garantizar su perfecta conservación. En concreto, todo el andamiaje ha quedado instalado y la semana que viene se realizarán los trabajos de arqueología y culminarán los que atañen a la señalización para que la restauración en sí comience en torno al día 6 de septiembre.   

Estas obras en el Arco de la Macarena, a cargo de la empresa Hermanos Campano y con un presupuesto de 205.000 euros, durarán en torno a cuatro meses e incluirán los tratamientos específicos necesarios para devolver este elemento a un perfecto estado de mantenimiento. “Forman parte, además, de una de las cuatro fases –dos de ellas están ya en marcha– en las que se ha diseñado y planificado la intervención patrimonial sobre el conjunto del monumento, y que cuenta con un presupuesto de 3 millones de euros. Se trata de una de las intervenciones más ambiciosas sobre el patrimonio de la ciudad en el actual mandato municipal y será clave para extender los flujos de turistas hacia esta zona de Sevilla”, ha explicado el delegado de Hábitat Urbano, Cultura y Turismo, Antonio Muñoz.

La intervención contempla sobre todo la recuperación de los pináculos de remate y la consolidación e impermeabilización de la cubierta. Urbanismo procederá también a la reparación de las diversas patologías que afectan a las fábricas, tanto en las de ladrillo como en las tapias.  De esta manera, se sustituirán las piezas deterioradas, se repararán las fisuras existentes y se repondrán las faltas. De cara a recuperar su aspecto original, se ha optado por eliminar aplicaciones realizadas en  actuaciones anteriores con morteros de cemento, así como con pinturas y productos acrílicos. Asimismo, se restaurarán los paños de azulejería del propio Arco, limpiándolos de depósitos, algas y otros elementos perjudiciales, para consolidar a continuación su superficie vítrea e imprimirle una protección final.

Con este mismo objetivo, se llevará a cabo también la restauración de policromía aparecida en la cornisa mediante consolidación química del revestimiento, inyección de mortero de cal en zonas con desprendimientos, eliminación manual de capas de cal sobre la policromía y reintegración con pigmentos naturales de las pérdidas de policromía. También se intervendrá en las columnas de piedra, limpiándolas mediante aplicación de papetas.

Por último se aplicará un revoco de mortero de cal acabado con un estuco y rematado mediante un enjalbegado de cal, proporcionando un acabado más acorde con el carácter de Bien de Interés Cultural del monumento.

Contiguo con el lienzo de muralla que discurre desde este punto hasta la Puerta de Córdoba, el Arco de la Macarena constituye uno de los escasos restos de la antigua cerca almohade que se conserva en la ciudad. De hecho, es junto a la citada Puerta de Córdoba y al Postigo del Aceite uno de los tres únicos accesos de la vieja muralla que se mantienen. Se considera que fue la entrada situada más al Norte, desde donde partía el antiguo camino de herradura hacia Extremadura y la elegida históricamente por los reyes para hacer su entrada a Sevilla. Su imagen actual es el resultado de la reforma a que fue sometido en el siglo XVIII y que le despojó del aspecto musulmán anterior concediéndole el estilo clasicista que tiene desde entonces.

La cara intramuros

Su ejecución coincide en el tiempo con la que se está realizando desde principios de año sobre la cara intramuros de la Muralla de la Macarena, que discurre durante 560 metros desde el propio Arco hasta la antigua Puerta de Córdoba. Valoradas en 920.000 euros, estas obras están financiadas en un 43 por ciento por el Gobierno estatal a través del programa del 1,5 % Cultural. Las labores de limpieza y de aplicación de tratamientos para la consolidación y protección de esta parte de la muralla avanzan en la actualidad a buen ritmo, habiéndose ejecutado ya aproximadamente un tercio de los trabajos previstos.

El lienzo extramuros

Pero las intervenciones para propiciar la recuperación completa de este tramo de la muralla no acaban ahí. Junto con estas obras en la cara interna y las comenzadas ya en el propio Arco, la Gerencia de Urbanismo se dispone a ejecutar próximamente trabajos igualmente de restauración y consolidación del lienzo extramuros y de la barbacana, con patologías muy similares a las de la cara intramuros. Tras haber recibido ya el informe favorable a la actuación de la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía, se prevé que las obras puedan comenzar el próximo año. También en este caso, la operación está financiada por el Ministerio de Fomento con cargo igualmente al Programa estatal del 1,5 por ciento cultural. En concreto, el Gobierno de España asume un 45 por ciento de la cantidad de 1.785.765 euros a que asciende esta fase de obras. 

La Puerta de Córdoba

La restauración de la Muralla Macarena no estaría completa sin una intervención en la Puerta de Córdoba, un importante y a la vez desconocido bien patrimonial que forma parte en la actualidad de una misma unidad estructural con la iglesia de San Hermenegildo. A la vista de ello, la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente ha aprobado conceder una primera subvención, con un importe de 70.000 euros, que permita la firma de un convenio con la Hermandad de San Hermenegildo para abordar obras de restauración de este elemento, exactamente de los paramentos exteriores de la Puerta de Córdoba, tanto de sus fábricas de tapia como de sus portadas de piedra y puertas de madera.