El Ayuntamiento inicia las obras para mejorar la movilidad peatonal en el acerado de la calle Resolana en el marco del proyecto de reordenación de la Ronda Histórica que incluye el desplazamiento del carril bici a la calzada

Tras desplazarse el carril bici a la calzada en la fase ejecutada el año pasado en Resolana, se gana para los peatones el espacio que ocupaba la anterior vía ciclista. Posteriormente, comenzará la fase de ejecución del nuevo carril bici entre el Arco de la Macarena y los Jardines del Valle, en un proyecto conjunto que se licitó por 873.000 euros.

El Ayuntamiento de Sevilla, a través de la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente en coordinación con el Distrito Casco Antiguo, ha iniciado las obras de mejora de la movilidad peatonal del acerado de la calle Resolana en el lado por donde discurre el carril bici, enmarcadas en el proyecto de reordenación completa de la Ronda Histórica. En concreto, tras ejecutarse el año pasado el desplazamiento del carril bici a la calzada, se demolerá ahora el antiguo para así ganar en anchura y amplitud de acera. 

El primer tramo de esta actuación se realizará en la calle Resolana hasta su confluencia con Feria para posteriormente continuar hasta la Plaza de la Esperanza de la Macarena. Una vez allí y hasta los Jardines del Valle, se iniciará la siguiente fase de ese proyecto de traslado de toda la vía ciclista a la calzada dando así continuidad a la existente en Resolana, ampliando a su vez el acerado. 

La licitación conjunta de esta intervención ascendió a 872.995,16 euros y las obras han sido ya adjudicadas a la empresa Vialterra Infraestructuras. La ampliación del espacio peatonal del acerado de la calle Resolana hasta la Plaza Esperanza Macarena con su correspondiente pavimentación tiene un plazo de ejecución de un mes, siendo de cinco meses la actuación completa de reordenación de la vía ciclista hasta los Jardines del Valle –a la altura de la calle Salesianos–. 

“Por un lado, los peatones tendrán más espacio en todo el acerado y una mayor seguridad en el tránsito al eliminarse los puntos más estrechos y, por tanto, la cercanía de las bicicletas; y, por el otro, los ciclistas podrán circular con mayor facilidad y seguridad. Y en ambos casos, se apuesta por una movilidad activa y por avanzar en una ciudad más sostenible y saludable”, ha explicado el delegado de Hábitat Urbano y Cohesión Social, Juan Manuel Flores.