EL CEREZO

El barrio de El Cerezo, que se encuentra en el distrito Macarena, es una zona de residencia de población que procede de otros municipios de la provincia y de otras zonas de Andalucía. A continuación, se incorpora el mapa que ha establecido la ERACIS de la Barriada El Cerezo, considerada como zona desfavorecida.

En el barrio de El Cerezo hay un total de 1.000 viviendas, construidas entre los años 60 y 70, distribuidas en 57 bloques de cuatro plantas sin ascensor y tres torres. A pesar de su antigüedad, el estado de conservación de estos inmuebles es el adecuado. Por otro lado, la población del barrio está mayoritariamente envejecida, pero contrasta con la población extranjera joven, principalmente entre los 20 y 40 años. Destacan los vecinos y vecinas de origen latino, especialmente de Bolivia y Ecuador, seguidos por personas procedentes de Marruecos y Nigeria.

En El Cerezo viven 5.320 personas: 2.849 son mujeres y 2.471 son hombres. La mayoría de la población, el 71%, tiene entre 16 y 64 años. Las personas mayores de 65 representan el 16%, mientras que los menores de edad suponen un 13% del total. En cuanto al origen de la población, el 35% de los residentes de la zona son extranjeros, de ellos el 51% son mujeres y el 49% son hombres.

La zona presenta un nivel socioeconómico bajo, con una alta tasa de desempleo y muchas personas trabajando en condiciones precarias o en la economía sumergida. Además, la baja cualificación personal dificulta el acceso al mercado laboral. Muchos de los residentes que pertenecen a la población migrante se encuentran en una situación administrativa irregular. Esto dificulta su acceso a la formación oficial y al empleo, lo que obliga a muchas de estas personas a trabajar en la economía sumergida.

En El Cerezo hay muchas familias con dificultades, bajos ingresos y un número importante de menores en situación de riesgo. Las mujeres enfrentan una gran carga, ya que apenas hay conciliación entre la vida personal y laboral, y la implicación de los padres en la crianza es muy limitada. Esto les dificulta acceder a formación o empleo. Además, la violencia de género es otro factor de riesgo presente en la zona.

En el ámbito educativo, en El Cerezo se dan casos de absentismo escolar que suelen ir acompañados de fracaso académico. También hay jóvenes que abandonan los estudios antes de terminar la educación secundaria obligatoria. La poca implicación de las familias en la educación de sus hijos e hijas es un factor clave en estos problemas. También hay problemáticas asociadas con la salud y los hábitos de vida poco saludables en menores, adolescentes y jóvenes. La escasa planificación familiar deriva en prácticas de riesgo y embarazos no deseados. Al mismo tiempo, hay un alto nivel de adicciones, consumo de alcohol y otras drogas, y una escasa formación en promoción de la salud.

En el barrio de El Cerezo hay problemas graves relacionados con la vivienda: muchas personas viven con demasiada gente en espacios muy pequeños o en pisos en mal estado. También es común el “re-alquiler” de habitaciones en pisos conocidos como “patera”, donde viven sobre todo personas inmigrantes que no pueden acceder a una vivienda digna por su situación económica y laboral. Por otro lado, han aumentado las ocupaciones y los desahucios, tanto por ocupaciones irregulares como por familias que no pueden pagar el alquiler o la hipoteca.

A nivel de convivencia, hay muchas dificultades para que vecinos migrantes y nacionales se integren y se respeten entre sí. En la zona hay una clara separación entre culturas y formas de vida, y existen prejuicios negativos hacia las personas migrantes, a quienes a menudo se asocia injustamente con la delincuencia y la exclusión social. Ocurren conflictos que afectan la convivencia entre personas de diferentes culturas, Por eso, es importante contar con recursos y medidas que garanticen la seguridad del vecindario y una convivencia pacífica entre todos los vecinos.

Muchas personas inmigrantes en la zona de El Cerezo solicitan informes de arraigo, un requisito necesario para poder acceder legalmente al trabajo. Por otro lado, el barrio tiene muy pocos espacios deportivos y de ocio saludable, y también escasean las plazas y zonas verdes, que además están en mal estado.

La Estrategia EDUSI ha sido una oportunidad para El Cerezo, ya que ha impulsado un desarrollo urbano más sostenible e integrador. Además, varias entidades y asociaciones trabajan en la zona junto con el Centro de Servicios Sociales Macarena, lo que permite dar una mejor respuesta a las necesidades del barrio.

El Cerezo tiene una alta presencia de población inmigrante, lo que enriquece la convivencia con una mezcla de culturas. El barrio está bien ubicado, cerca del centro de la ciudad y con buenas conexiones de transporte público, como autobuses y estaciones de servicio en los alrededores. También cuenta con dos plazas principales: la Plaza Playa de Punta Umbría y la Plaza Playa de Isla Canela.

El barrio de El Cerezo cuenta con varios servicios públicos importantes. Entre ellos se encuentra el Centro de Salud El Alamillo, el Centro Integral de Atención a la Mujer Macarena y la Unidad de Promoción de la Salud. También dispone del espacio deportivo Las Golondrinas, que ofrece opciones para la práctica de deporte y actividades saludables. Muy cerca del barrio se encuentran dos centros de servicios sociales: el CSS Polígono Norte y el CSS Macarena, ambos ubicados en el Centro Polivalente Hogar Virgen de los Reyes. Desde este último se atiende a la población de El Cerezo y se desarrollan intervenciones sociales a nivel individual, familiar y comunitario. El barrio también está bien comunicado con otros puntos clave de la ciudad. Está próximo al Hospital Virgen Macarena y a la ciudad universitaria, donde se concentran las facultades del ámbito sanitario. Además, en las cercanías se encuentra el Centro Cívico El Cubo, que ofrece actividades y recursos para los vecinos.

En cuanto al apoyo social, en El Cerezo trabajan numerosas entidades que colaboran con la comunidad. Algunas de ellas son: Avanti, Movimiento por la Paz, Andalucía Acoge, Solidarios, Manos Abiertas, Asociación Provivienda, Nuevo Hogar Betania, Sevilla Acoge, Rutas de Sevilla, Federación Liberación y Vives Emplea, entre otras. Estas organizaciones desempeñan un papel clave en la mejora de la calidad de vida del barrio.